“Cómo desarrollar la resiliencia en familia”

En la vida de todas las personas las posibilidades de que solo ocurran cosas buenas son muy escasas. Tarde o temprano los seres humanos tenemos que enfrentarnos a la frustración, las enfermedades, reveses, fracasos, pérdidas de seres queridos, etc. Todo esto constituye nuestra particular colección de cicatrices emocionales que conviene aprender a manejar para que no nos impidan ser felices y vivir la vida con ilusión.

Cualquier familia, a lo largo de su ciclo vital, se enfrenta a situaciones adversas y estresantes, como por ejemplo problemas económicos, de salud, cambios de trabajo o de residencia, duelos, separaciones, etc. que ponen a prueba su capacidad adaptativa. Por tanto, esta situación de pandemia que estamos viviendo, puede convertirse en un escenario perfecto para mejorar la resiliencia de todas las personas de la familia y fortalecer las cualidades que nos permiten una adaptación positiva en una situación de adversidad o sufrimiento, presente o futuras, sea la que sea.