Beatriz Fernández, directora de ACTAYS, perdió a su hija por una enfermedad rara: “Para mí sería muy fácil enfadarme con el mundo y encerrarme en mi casa. Pero haciendo eso no ayudaría a nadie”

Con una fuerza y solidaridad enormes, Beatriz señala que supo que “perder a mi hija era inevitable, pero podía dedicar el esfuerzo a buscar una cura” y afirma que ha reinventado el significado de esperanza, pues “esperanza no es solo salvar a tu hija, sino tener la posibilidad de salvar a otros”.