Daniel Abad y Fernando Botella: “La educación es armonía y hay que tener un buen ritmo y una buena escucha”
En numerosas ocasiones, educadores (padres, madres y profesores) buscamos ideas guía, referencias o incluso recetas para educar bien. Porque está claro que educar es un trabajo a largo plazo, que muchas veces a corto plazo no vemos resultados o no tenemos claro dónde estamos yendo, y necesitamos asegurarnos de que estamos yendo por un camino que nos lleve a buen puerto. Pero ya lo sabemos, los niños no vienen con manual de instrucciones ni la educación es cuestión de recetas infalibles. Pero felizmente sí encontramos referencias, ideas que nos pueden guiar, reflexiones que nos hacen replantearnos cosas e incluso avances científicos que nos ayudan a tomar conciencia de la importancia de educar en una u otra habilidad. Hablamos de los aprendizajes de la neurociencia (de la mano de Eduforics) y de la música (de la mano del director de orquesta Daniel Abad y del experto en creatividad Fernando Botella).
Hoy queremos hablaros de dos referencias que pueden ser de gran utilidad para educar. Una es la neurociencia, con cuyos avances hemos podido (re)conocer la importancia de la inteligencia emocional, de la empatía e incluso de la educación artística. Y la otra es la música, que nos presenta ideas clave para educar en armonía.
Como nos dice Álvaro Marchessi en Eduforics, “los progresos en la neurociencia aportan sugerencias importantes para conocer los procesos de desarrollo y de aprendizaje de los alumnos; confirman determinadas hipótesis que proceden de la psicología del aprendizaje o de la experiencia educativa; y descartan experiencias educativas que son escasamente relevantes”. Gracias a estos progresos, somos conscientes de la importancia de “la comunicación, el lenguaje, las relaciones sociales, la comprensión de los otros y la empatía” como “dimensiones básicas para el desarrollo y el aprendizaje”, así como “la confianza, el bienestar corporal, personal y afectivo, la actividad, la exploración y las habilidades cognitivas –denominadas funciones ejecutivas- para planificar y regular el pensamiento, las emociones y la acción”. Frente a corrientes que desprestigian la educación artística, la neurociencia también nos ha ayudado a entender que “la música, el teatro, el deporte, los cuentos, el juego y las artes favorecen el fortalecimiento de las capacidades básicas de los alumnos”.
Precisamente la música nos ofrece muchas claves para educar con más conciencia y bienestar. En esta entrevista, Daniel Abad, director de orquesta, y Fernando Botella, experto en talento, nos recuerdan que “la armonía es lo que da sentido al mensaje”, ya sea educativo o musical y que “la armonía tiene mucho que ver con el equilibrio” y con que “todos los mensajes estén afinados y seamos capaces de poner las cosas en su sitio”. Pero hay más conceptos musicales que nos prestan ideas interesantes para educar, como el modo, que es “la manera de transmitir el mensaje, el entorno”, idealmente agradable, “en el que se produce la educación”. Fernando Botella nos propone por eso educar con sentido del humor. Otro de los conceptos es el ritmo, que “tiene que ver con cómo manejamos el tiempo a la hora de educar”. Y por último una de las grandes lecciones de la música es la capacidad de escucha, básica a la hora de educar.