En un patio de un colegio se escucha la canción Mayores de Becky G. y las niñas se ponen a cantarlo a pleno pulmón: “A mí me gusta que me traten como dama aunque de eso se me olvide cuando estamos en la cama. A mí me gustan mayores, de esos que llaman señores, de los que te abren la puerta y te mandan flores. “A mí me gustan más grandes, que no me quepa en la boca los besos que quiera darme”. Esta canción es todo un exitazo, su vídeo (en el que aparece la cantante en ropa interior y muy sexy y donde deja claro que le gustan mayores por su dinero) cuenta con 930 millones de reproducciones en Youtube.
No es un caso aislado: estudiantes de quinto de Primaria se saben de memoria la canción Se preparó (614 millones de reproducciones en Youtube), que dice así: “Ese bobo se perdió a esa mamacita tan chula /Yo la vi en el club, la imagino desnuda /Un hermoso cuerpo /Yo te lo aseguro que como ella no hay dos”. Hablamos con Alba Alonso, de Realkiddys, sobre los mensajes de canciones omnipresentes de reggaetón que nuestros hijos seguramente se sepan de memoria y de cómo darles la vuelta para educar en la igualdad.
¿Qué te parece la polémica de la canción Mayores, de la que hablaste en un taller que organizamos con Endesa?
Me parece que tiene un ritmo muy bailable y una letra que no puedo describir porque no encuentro palabras para ello. Es un mensaje que incita a la sumisión de la mujer y al poder del hombre rico sobre ella. O lo que es lo mismo, al dinero comprando belleza. Y eso todos sabemos cómo se llama porque sí tiene nombre: prostitución. Esto no es una cuestión de edad ni mucho menos. Incluso es normal que a una adolescente le gusten mayores, porque las chicas suelen ser mucho más maduras.
Pero mayores que ella, no mayores que sus padres. Eso no tiene sentido. E incluso en el remoto caso de que llegase a tenerlo desde luego no es el tipo de amor que nos presentan en esta canción. En esta letra ella se autodescribe como una “dama” y él como “el caballero”. Una dama a la que hay que regalar flores y diamantes para poder comprarla. Una dama que ha de ser además maravillosa en la cama al igual que él, como si la sexualidad fuera el mayor valor de hombres y mujeres.
Cierto que las mujeres son representadas como lo más bajo a través de esta canción, pero es que los hombres tampoco se quedan atrás. Según esta letra un hombre vale solo hasta el momento en el que su cuerpo deje de funcionar sexualmente. Como si ese fuera la única valía de un hombre, su “poder sexual”, además de “su cartera” claro.
¿Te preocupa que a nuestros niños les gusten canciones de reggaetón? ¿Por qué?
Afortunadamente, la mayoría de los niños y niñas pequeños que escuchan y bailan esta letra no están captando el verdadero mensaje (tristemente, muchos adultos tampoco). Pero corremos el riesgo de que sí lo están interiorizando de alguna manera. Y en el caso de que la canción se encuentre además acompañada por el vídeo la pócima puede ser explosiva.
“No creo que a nadie le guste imaginarse a su hija adolescente bailando esta canción en la discoteca mientras mira a un señor de 50 años pensando en irse con él si este le regala flores. Pero tampoco quiero a mi hija de 4 años bailándola con un top rosa muy mono en el baile de fin de curso”
Y quizás “A mí me gustan mayores” no llegue al baile de fin de curso, pero muchas canciones de reggaetón con mensajes similares se están bailando en cumpleaños infantiles, fiestas de navidad o fines de semana de chupipandi familiar. Y NO me parece correcto.
“No entiendo que no seamos capaces de darnos cuenta…El reggeatón no es mala música, sus letras casi siempre sí lo son”
¿Cómo podemos desde casa educar por la igualdad y contrarrestar los mensajes machistas e hipersexualizados de este omnipresente estilo musical?
Con los pequeños lo tenemos muy fácil. Esta canción NO se escucha en casa y en el caso de que se pida se puede explicar por qué no. Es una canción que dice cosas feas sobre las mujeres y los hombres, y por eso no nos gusta.
“Si de adolescentes se trata, entonces tenemos que pararnos con ellos a desgranar (no de manera muy académica si queremos que nos escuchen, claro) el significado de esa letra. Tenemos que conseguir que tanto a nuestras hijas como a nuestros hijos les dé verdadera vergüenza cantar canciones que enfatizan la prostitución, la sumisión de la mujer sobre el hombre y un tipo de masculinidad y feminidad nada sana para nadie”.
También sería interesante enfatizar lo importante y positivo de la independencia económica por parte de la mujer, algo que tanto nos ha costado conseguir por otra parte. Porque de eso también habla la letra, de una mujer que busca la “cartera” de un hombre mayor. Tampoco estaría de más sacar temas como la pederastia o el grooming como posibles ejemplos de “esos amores entre adolescentes y mayores”.
“Desde luego, enseñarles a preguntarse qué dicen realmente las letras que están cantando (incluso aquellas que están en otro idioma) es un paso esencial para adquirir una de las competencias más importantes de la vida: el pensamiento crítico”.
¿Cómo podemos dar la vuelta y aprovechar para educar en igualdad con esta música que tanto engancha?
Cambiar las letras, los mensajes y las imágenes que acompañan a estas canciones es probablemente uno de los mejores métodos. En nuestro colegio ya lo hicimos hace un par de años con la letra de Enrique Iglesias “Bailando”. Era genial ver como todos los niños y niñas del cole cantaban a todas horas esta nueva canción donde la letra sí tenía un gran mensaje. Está claro que desde el colegio también podemos poner nuestro granito de arena.
“Este curso en mi centro tenemos pensado trabajar “A mí me gustan mayores” en marzo del próximo año. En este caso se ha hecho un cambio de letra donde lo importante ha pasado a ser la valía de las chicas en el terreno de las ciencias y la tecnología”.
La canción ha quedado fantástica, porque como os comentaba el problema no está en el ritmo sino en el mensaje. Os dejo por aquí las primeras estrofas a ver si os gustan:
“A mí me gusta que me digan que sí valgo
Aunque a veces se me olvide cuando exámenes yo hago
A mí me gusta que me digan tú sí puedes
Al oído por la noche después de hacer los deberes
Mola la tecnología
Porque es interesante
y cómo no la biología
ningún miedo por delante
¿Qué importa que digan los demás?
A mí me gustan las ciencias, mates e ingenierías
porque pa todo yo valgo
esto no es fantasía/
No me parece muy dura, ninguna arquitectura
pues mi talento lo vale
nadie lo ponga en duda.
Lista
Oh oh oh oh oh
yo soy muy lista
Oh oh oh oh oh….”
Si te interesa educar en la igualdad, puedes ver estos artículos:
- Educar en la igualdad y respeto. El largo camino que nos queda por recorrer a los hombres de Pablo Romero
- Seguimos educando con muchos estereotipos
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Imagen de portada: fotograma del videoclip Mayores, de Becky G.
