José María Gasalla: “La confianza es el elemento crítico de cualquier relación, también con los hijos”

José María Gasalla, que estará con nosotros el 7 de abril en Barcelona hablando de cómo construir una relación de confianza con nuestros hijos, es profesor, ingeniero, psicólogo y un conferenciante apasionado. Considera “de importancia capital” crear confianza con los hijos y aquí nos ofrece importantes claves para conseguirlo.

¿Qué mensaje quieres dejar con tu ponencia?

En la conferencia voy a incidir en varios mensajes clave,  todos ellos alrededor de uno que para mí me parece fundamental, que es la confianza. La confianza es el elemento crítico de cualquier relación humana y esencialmente en una relación con hijos. Pero no se trata de una confianza ciega sino de una confianza inteligente en donde esté por delante el respeto al otro. “Como legítimo otro” que diría Humberto Maturana. Y voy a trabajar en esta ponencia no solamente las claves para inspirar confianza a otros, sino también el punto de partida: la confianza que tenemos con nosotros mismos, es decir nuestro nivel de autoconfianza y cómo podemos potenciar la cuando se nos viene abajo por distintos motivos.

¿Qué claves podrías ofrecernos para educar con pasión?

Educar con pasión significa sentir pasión por la educación. Ser conscientes de que este puede ser nuestro sentido de vida al menos durante unos años cuando estamos como padres ayudando, facilitando y potenciando el desarrollo de nuestros hijos. Y es importante para que fluya nuestra energía pensar la influencia positiva que podemos ejercer sobre ellos .Merece la pena recordar lo que decía Goethe: “Trata a un ser humano como es y seguirá siendo como es, trata a un ser humano como puede llegar a ser y se convertirá en lo que puede llegar a ser. Y por otra parte ser sensibles y conscientes también de la importancia del pensamiento y de las previsiones que hacemos sobre nuestros hijos. El famoso efecto Pigmalión. Una vez que hacemos una previsión o profecía inconscientemente intentamos que se cumpla y actuamos de forma que la facilitamos. No se trata de que pensemos que nuestros hijos vayan a ser premio Nobel, si no precisamente el intentar descubrir en qué pueden ser especiales. Disposición de facilitar su pasión lo que aman tus hijos ,pero no sus caprichos.

¿Qué importancia tiene la confianza en la relación con nuestros hijos y en su educación? ¿Cómo podemos forjarla?

Para mí tiene una importancia capital. Me gusta la frase de autor desconocido que dice “la confianza no excluye miedos e incertidumbres sino que los exorciza quitándoles el poder de determinar nuestra vida”. Y muchas veces estamos agarrados, mediatizados y dirigidos por nuestros miedos. Precisamente los miedos son la antítesis de la confianza. Tenemos que empezar por identificarlos y así saber por qué no hemos hablado cuando deberíamos haberlo hecho, por qué no hemos decidido lo que tendríamos que haber decidido, por qué no paramos aquella actuación de nuestro hijo que habría que haber parado o por qué no creamos el límite que le podría haber servido para estar funcionando en unos determinados valores. Estamos en momentos de crisis de confianza con un gran pesimismo, escepticismo, hipocresía, cinismo incluso con la aparición de la llamada postverdad que no es ni más ni menos que una falsedad dicha de otra manera. O creamos un clima de confianza en nuestra casa o va a ser muy difícil colaborar en el desarrollo de nuestros hijos. Y ahí tendremos que tener muy en cuenta los elementos críticos de la confianza como son :

1. La conciencia del otro, que implica el respeto, la escucha , participación y colaboración
2. La claridad, que implica la verdad. La verdad libera. La mentira es una arma de destrucción masiva.
3. El cumplimiento de la palabra, otra forma de ir creando confianza.
4. La coherencia entre nuestros dichos y nuestras acciones.
5. La consistencia que hace que nuestros comportamientos estén alineados con unos determinados valores.
6. El coraje para decirle a nuestro hijo lo que tenemos que decirle, para limitar de lo que tengamos que limitarle, para decir que no cuando tenga que ser no y muy seriamente hacerlo y mantenernos en ello.
7. El compromiso, esa determinación de estar totalmente volcado en nuestra misión y en nuestro papel como padres.

¿Cuáles crees que son los retos más importantes a la hora de educar a nuestros hijos hoy en día?

Yo me centraría en el respeto y si vamos a su origen respecto significa “mirar de nuevo”. Y a veces conviene separarse para después volverse a acercar intentando ver a la persona que tenemos cerca de nosotros. Otro reto puede ser la humildad para aprender de tus hijos aceptando que pueden saber más que tú aunque tengan 30 años menos de existencia, aceptando que nuestro proceso vital implica el desaprender continuamente para seguir aprendiendo. Otro reto puede estar relacionado con la frase de Vícktor  Frankl  “cuando no podemos cambiar la situación a la que nos enfrentamos, el reto consiste en cambiarnos a nosotros mismos”. Y esa es la idea, somos seres en continua evolución que tenemos que ir mejorando. En otro orden de cosas lanzaría el reto de comenzar el día sonriendo, creando una atmósfera positiva a nuestro alrededor intentando distinguir todo lo bueno y todo lo bello que existe sin ir directamente a ver “la manchita”. Y otro reto final es luchar contra nuestra tendencia a hacer que nuestros hijos sean copias nuestras. Como decía Carl Jung  “todos nacemos originales y morimos copias”. Ayuda a tus hijos a poder seguir siendo originales.

¿Por qué te has animado a participar en el evento?

Para mí es una oportunidad de seguir investigando ,trabajando y traspasando mi conocimiento en lo que es mi pasión. Toda mi vida he estado inmerso en procesos de aprendizaje ,enseñanza, formación, desarrollo …es vital para mí hasta tal punto que suelo decir: ”Aprender es vivir y sólo se vive si se sigue aprendiendo”.  Esta es una gran oportunidad para seguir aprendiendo y poder transmitir ese aprendizaje a otros

¿Qué te parece el proyecto Gestionando hijos?

Me parece una maravilla. Tenemos que ir abriendo nuestra conciencia y poder vislumbrar los sistemas sociales de una forma integral. No somos seres individuales que cambian a ser otra persona en cualquier momento o situación. Todo nos repercute internamente. Y cuando somos profesionales seguimos siendo padres al mismo tiempo al igual que ciudadanos y cuando somos padres sucede lo mismo. No podemos perder de vista la repercusión que en  la sociedad va a tener la educación que demos a nuestros hijos. Es cuestión de trabajar sistémicamente y ver las sinergias que podemos conseguir de uno y otro lado. Con frecuencia en mis conferencias para profesionales de la empresa hago mención a situaciones cotidianas de la familia y de nuestra relaciones personales. Y cuando hablo para padres, también les hablo del mundo de la empresa.