¿Qué puede hacer la música para ayudarte en la educación de tus hijos e hijas? ¿Te has parado a pensarlo alguna vez? No hace falta ser músico o saber sobre música para poder beneficiarte de las ventajas que esta puede tener en el aprendizaje de tus peques, solo tienes que ponerle ingenio y un poquito de ganas. Este fue el mensaje principal de la ponencia de Salva López en nuestro último evento en Alicante, en el que nos habló sobre cómo educar con música ya seamos padres, madres o docentes.
La música es una gran creadora de ambientes mentales
No hay manera de evitarlo. La música nos hace sentir, nos transmite estados de ánimo, hace que pensemos o dejemos la mente en blanco, que tengamos ganas de bailar, de reflexionar o de ponernos a saltar… Es capaz de crear ambientes en los que nos sumergimos. ¿Cómo podemos aprovecharnos de esto para educar a nuestros hijos e hijas?
Salva López nos contó que él recibe a sus alumnos universitarios cada mañana con Red Hot Chili Peppers a todo volumen. De esta manera, consigue que los jóvenes entren en clase animados y con ganas de aprender y de afrontar el día que tienen por delante. Pero la música también es muy útil para dejarla de fondo mientras trabajan o hacen sus deberes –obviamente, habrá que cambiar el estilo musical si lo que necesitan es concentrarse, o se pondrán a bailar y saltar en lugar de hacer sus tareas–.
Lo mismo podemos hacer con nuestros hijos e hijas en casa. Salva López en su ponencia lanzó una pregunta, “¿cuántas veces tenéis que ir a la habitación a decirles a vuestros hijos que se levanten?”. Esta puede ser una muy buena ocasión para poner en práctica los trucos que nos contó Salva para educar con música, por ejemplo, poniéndoles canciones animadas que les hagan empezar el día con ganas y buen humor, “hace que su cerebro se despierte, quieran o no quieran, su cerebro ya está activo”.
Así pues, la música nos puede ayudar “a crear ambientes funcionales”, bien sea para que se concentren mientras hacen los deberes, para estimular la conversación durante la cena o para que se relajen mientras se dan un baño.
La música es un nexo de conexión emocional
Salva nos contó también que la música puede usarse para encontrar puntos en común entre madres-padres e hijos y docentes-alumnos. Nuestros gustos musicales y los de nuestros hijos puede que se asemejen tanto como nuestras edades; un buen trecho nos separa. Pero eso no quiere decir que no podamos llegar a descubrir grupos o canciones que nos gusten a todos y mediante los cuales podamos abrir nuevos temas de conversación o disfrutar de un concierto improvisado padre-hijo en el coche de camino al colegio.
De la misma manera, tener gustos diferentes a nuestros hijos e hijas es bien interesante, pues nos permite conocer nuevos estilos musicales actuales, saber qué les gusta, qué bailan cuando salen con sus amigos… Y también al revés, es decir, enseñarles grupos que nos gustan o que nos hacían mover las caderas cuando éramos jóvenes puede ser una buena excusa para conversar y estrechar lazos.
La música ayuda a cultivar la atención a los detalles
Salva López nos contó que, en los últimos tiempos, “vamos con la atención dispersa, tenemos 30 pantallas en las manos y todo lo que pasa en el móvil es súper alucinante”, entonces, ¿cómo podemos entrenar la atención con la música?
“Si no nos fijamos, hay muchos matices que no percibimos”. Utilizando la música, podemos conducir la atención de nuestros hijos hacia aquello que está más allá de lo evidente. Los detalles, los instrumentos, las capas que tienen las canciones… “Es maravilloso darse cuenta de que puedes escuchar una canción cien veces y cada vez fijarte en detalles distintos”, apuntó Salva, “y esto lo podemos plantear como un juego”.
La música nos sirve para explicar a nuestros hijos e hijas determinados temas
En la ponencia, Salva López puso el ejemplo de la amistad como uno de los temas que podemos explicar a nuestros hijos utilizando diferentes canciones. Pero, en realidad, podemos usar la música como excusa para hablar con ellos de casi cualquier tema. “Porque la música cuenta muchas cosas, los letristas tienen que contar en muy pocas palabras, que entren en un ritmo, algo que tenga interés y que sea bonito”, nos contó Salva.
El amor, las pérdidas, las relaciones, los amigos, los cambios, las caídas… Son temas trascendentales que los músicos suelen tratar en sus canciones y son justo temas que, a veces, nos cuesta encontrar las palabras que utilizar cuando hablamos al respecto con nuestros hijos.
Como hemos visto, la música puede sernos muy útil a la hora de educar a nuestros hijos e hijas. Para saber más sobre el tema, no os perdáis la ponencia entera de Salva López, porque no solo aprenderéis de sus consejos sobre educar con música, sino que además pasaréis un rato muy divertido.
