La jornada escolar continua supone una pérdida de 8.048 millones de euros al año para las familias. Esta es la principal conclusión a la que llega el estudio de ESADE sobre el modelo de jornada continua o matinal que cada vez más abunda en las escuelas, elaborado por Lucas Gortazar, director de Educación en EsadeEcPol, Marta Ferrero, profesora de la facultad de Educación de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), y Ángel Martínez, analista en EsadeEcpol.
Esta jornada matinal, cuya implantación en numerosas escuelas ha aumentado por la pandemia, plantea dificultades en torno a la conciliación de las familias, especialmente en las mujeres, que suelen ser la figura tradicional que se encarga del cuidado, educación y recogida de los niños de la escuela. Esto conlleva que las mujeres tengan que ajustar sus horarios de trabajo y realicen menos horas que los hombres para ajustarse al cuidado de los hijos. “La evidencia internacional muestra que una expansión del tiempo en la escuela (tanto lectivo como no lectivo) favorece de forma decisiva la incorporación de las mujeres en el mercado de trabajo, y a su vez, el número de horas que estas trabajan”, señala el informe.
Pérdida de ingresos sobre todo en las mujeres
Gracias a los datos de la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Nacional de Estadística, el estudio concluye que en los hogares de España que no hacen uso del servicio de cuidados de menores, un 91%, las mujeres pueden llegar a perder 1.850€ brutos de ingresos al año por tener que ajustarse a la jornada matinal de las escuelas de los niños frente a una pérdida de 970€ para los padres, ya que en menor medida ellos se encargan de los hijos.
Para el 9% que falta, los hogares que sí que hacen uso de ayuda externa para el cuidado de los hijos e hijas, la jornada matinal sí que beneficia a las madres ya que las permite conseguir más de 3.290€ brutos al año al no tener que recortar horas de su jornada completa.
Esta jornada matinal conlleva a las familias sin ayuda una pérdida, según el estudio, “de 9.653 millones de euros que se concentra fundamentalmente en las madres, lo cual agrava las brechas de género ya existentes”. Para las familias con ayuda, la jornada continua sí que permite a las mujeres aumentar los ingresos en 1.605 millones de euros, aunque una parte de ese dinero se destinaría a pagar los cuidados de los hijos por parte de gente externa. Por ello, calculan con los datos obtenidos que “el saldo de ingresos laborales de la jornada continua es por tanto negativo y equivalente a 8.048 millones de euros de ingresos laborales brutos en el año 2018″.
Consecuencias de la jornada continua en el alumnado
A pesar de que no existe evidencia científica que permita relacionar un tipo de jornada, o completa o continua, con un mejor rendimiento académico del alumnado, sí que los estudios apuntan a que pasar un mayor tiempo en las escuelas, es decir, tener una jornada completa, beneficia el rendimiento académico y el bienestar de los alumnos.
El estudio mediante la revisión bibliográfica señala cómo la jornada matinal se relaciona con la menor implicación del alumnado en la escuela al pasar menos horas en ella. Por el contrario, apunta que la atención de los alumnos mejora estando en una jornada completa. “La atención de los alumnos aumenta hasta media mañana, disminuye hacia el mediodía y vuelve a mejorar en mayor o menor medida a lo largo de la tarde”.
Asimismo, la jornada completa mejora los ritmos de sueño y descanso tanto en niños pequeños como en adolescentes. “Un horario ajustado a las necesidades de descanso y sueño del alumnado es crucial: tanto las siestas para alumnos en edad temprana como evitar un comienzo temprano en edades adolescentes pueden marcar la diferencia”, cuentan.
Los profesores opinan
El estudio también ha querido contar con la opinión de los profesores sobre sus preferencias en cuanto a jornada completa o jornada continua de su horario laboral. La mayoría del profesorado, un 87%, preguntados por su conformidad por la jornada matinal están a favor de ella; y preguntados por la jornada completa, un 61% no está conforme con ella. Algunos de los motivos que esgriman son la mejora del rendimiento escolar del alumnado y la conciliación de las familias, opiniones que contrastan con los datos que muestra este estudio.
Abogar por una jornada completa en las escuelas
El estudio plantea que la jornada completa en las escuelas aumentaría en 1.200 millones de euros la recaudación para fondos públicos mediante el IRPF. Justo estos ingresos plantean destinarlos a la educación para financiar tanto becas de comedor, como el desarrollo de infraestructuras escolares de los centros públicos de Infantil y Primaria para que todos tengan comedor, como dar complementos salariales al profesorado por aumentar las horas en los centros escolares, para que así, sea posible dar una jornada completa igualitaria al alumnado.
