– ¿Quieres conseguir algo de la gente? Mételes miedo.
Los anuncios de la DGT (Dirección General de Tráfico) funcionan porque meten miedo. Las imágenes de las cajetillas con un cuerpo necrosándose quieren meternos miedo.
-Juan, como hagas eso…, te voy a meter en el cuarto de las ratas- dice la madre al niño de cuatro años.
-Si quieres que la empresa funcione, haz que tus subordinados sientan miedo.
-Si quieres que tus alumnos se callen diles que les vas a suspender a todos, que sientan el miedo.
-Si quieres que los ciudadanos paguen sus impuestos, provócales miedo. Amenázales con la cárcel. No entienden otra medida.
-Si quieres que los jóvenes no se reúnan en corrillos hazles sentir miedo.
Supongo que por eso la Comunidad de Madrid ha decidido intentar meternos miedo para que nos pongamos la mascarilla (compara el calor de la mascarilla con el calor de un crematorio) o el de Canarias para darnos cuenta que nuestra actitud irresponsable puede matar.
¿Es el miedo el mejor aliado de la educación? La DGT, los gobiernos autonómicos, la madre de Juan, el jefe de la empresa, el profesor que amenaza con suspender a sus alumnos, la Hacienda pública han pensado que sí.
Si aceptamos que el miedo es el mejor aliado de la educación, supongo que debemos admitir que formamos parte de una sociedad intelectual y emocionalmente pobre, sin capacidad de reflexión. No entendemos que estamos ante un proyecto colectivo en las carreteras, en la lucha contra el covid, en la financiación de los bienes públicos y defendemos nuestros intereses individuales sin atender las consecuencias colectivas: accidentes de tráfico, contagios, quiebra del Estado.
Solo actuamos correctamente si nos ve el radar, la policía, el inspector de Hacienda. Nuestros hijos solo harán lo correcto si les metemos miedo. Si fuera así, debemos aceptar que nos hemos rendido: la especia humana es mala por naturaleza y solo reacciona ante la coacción, la posible pérdida.
Hay quien piensa que, mejor instrumento educativo que el miedo, es el estímulo. El gobierno alemán lo ha pensado así. ¿Qué mejor que decirles a nuestros jóvenes que su actitud responsable les convertirá en héroes? Este vídeo titulado “El héroe del sofá” es de un gobierno respetuoso con sus ciudadanos a los que trata como seres inteligentes.
A la hora de educar a nuestros hijos, hay que elegir: miedo o educación (sacar todo el potencial de nuestros hijos o alumnos para su pleno desarrollo).
A la hora de educar a nuestros hijos hay que elegir: tratarles como tontos o como personas potencialmente inteligentes, capaces de distinguir el bien del mal y obrar en consecuencia.
¿Cómo preferimos que nos trate nuestro jefe, el Estado, nuestra pareja, el profesor?
Hay que elegir entre miedo o pedagogía. Aunque hay quien cree que el miedo es pedagógico.
Yo no.
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