Nuestros hijos e hijas muchas veces son unos verdaderos expertos en el arte de disfrutar de la vida y de gozar del presente. De ellos deberíamos aprender los adultos. La pretensión de educar a niños y niñas felices y preparados para el futuro puede suponer una presión muy grande para los padres y madres, pero nuestros propios hijos nos pueden enseñar que todo es mucho más sencillo. De hecho, en el optimismo y la diversión, padres y madres tenemos unos profesores de excepción, que son nuestros hijos e hijas, tal como demuestra este cortometraje que nos recuerda la importancia de reír y disfrutar de nuestra vida.
El propósito de este vídeo, cuentan en JAF Producciones, “es recordar a los padres sumergidos en una dinámica cultural de trabajo y consumo, que los niños son niños, y que deben jugar y disfrutar su niñez y apoyarlos en sus metas y sus sueños y por supuesto… jugar con ellos. La obsesión por procurarles lo mejor, nos puede cegar y hacernos olvidar las cosas que dan sentido a nuestra vida, transmitiéndoselo también a ellos”.