Crónica del taller de Fernando Botella e Iván Santacruz: “Orientar es mágico”
El pasado viernes 16 de diciembre, el experto en talento Fernando Botella y el mago Iván Santacruz condujeron un taller lleno de juegos de magia y reflexiones para aprender que orientar a nuestros hijos para decidir su futuro y encontrar y desarrollar su talento es mágico. Respetar sus sueños, no llenar su tiempo de muchas actividades, ayudarles a encontrar el significado de lo que hacen y mantener la ilusión y el buen humor son algunas de las claves que nos ofrecieron en este taller patrocinado por Lidl España y Fundación Bertelsmann, celebrado en el Colegio Amorós gracias a la Fundación SM.
El taller comenzó con las reflexiones de Juan José Juárez, de la Fundación Bertelsmann, que recordó que antes “los jóvenes tenían un mapa para elegir su futuro, pero ahora la realidad es líquida y se encuentran con un mar”. Por eso, Juárez habló de que los jóvenes han de ser ahora surfistas y para eso deben conocerse muy bien a sí mismos y sus capacidades y además deben conocer el entorno, el mar en el que se mueven. Debido a ese entorno tan cambiante, es importante recordar que “los padres debéis orientar: la familia es lo que más influye en los chavales para decidir el futuro”. Y nos presentó el Manual práctico para padres ¿Cómo orientar profesionalmente a su hijo?
Del entorno cambiante también habló Henar Marrón, Directora de Formación de Lidl, que destacó que “el cambio genera muchas oportunidades y eso es lo que debemos transmitir a nuestros hijos”. Según datos de la OCDE este nuevo entorno, afirma Henar, requerirá de los jóvenes una formación media, mientras que España es un país de extremos, porque gran parte de los jóvenes o están estudiando una carrera o directamente no están estudiando. Henar nos habló de la FP Dual, que consiste en aprender haciendo, combinando clases en un centro educativo y prácticas en empresa, y permite “tener una visión global de la empresa”.
Para orientar y educar, no tenemos que tener miedo a las dudas, afirma Fernando, porque “estamos en continuo movimiento y desarrollo, dudar es fantástico”. De hecho, nos dice Fernando que el último Nobel de Física dice que “las dudas viajan en las maletas de los sabios”.
El mago Iván Santacruz fue amenizando el taller con juegos de magia y pidió la implicación de todo el público en
los diferentes juegos porque “la educación es un trabajo en equipo, un triángulo entre padres, hijos y profes”. Y Fernando nos habló de la importancia de los sueños. En su opinión, el cuento de la lechera nunca debió ser contado, porque “nos dice que como tengas un sueño tienes un problema. No podemos asociar los sueños o el riesgo con el miedo cuando gestionamos el talento de nuestro hijo”. Sobre la importancia del sueño, nos contó la historia de Lennon, una niña que bailó ante el famoso coreógrafo Rudolf Nureyev, que criticó con desprecio el baile de Lennon. La niña dejó la danza. Cuando Lennon era adulta, vio a Nureyev en otro espectáculo y le preguntó por qué le había criticado. Nureyev le contestó que bailaba muy bien y solo quería que encontrara la confianza en sí misma. Claro, ahora Nureyev nos cae mal, pero “¿no seremos Nureyevs cuando les decimos a nuestros hijos: “¿De verdad a esto te quieres dedicar?””.
Para soñar, los niños y niñas necesitan espacio y tiempo. Por eso Fernando nos quiso hacer reflexionar sobre la necesidad de “simplificar la vida de los niños. Encontrar el talento depende muchas veces de quitar lo que sobra”, como actividades y roles, nos preguntó “¿Cuándo mucho es demasiado?” y nos habló de Kim John Payne y de su movimiento y libro Simplicity Parenting.
Hablando del desarrollo del talento, Fernando reflexionó sobre la voluntad y la motivación. Para Fernando, lo más importante es encontrar el significado de lo que hacemos, que implica que lo entendemos, nos gusta y queremos hacerlo. “La forma de encontrar ese significado es aprender haciendo”.