Cuando nace nuestro bebé, tenemos los mayores cuidados para que no sufra ninguna molestia y no haya complicaciones en sus primeros meses de vida. Las horas en las que nuestro bebé duerme también nos preocupan, y el espacio en donde lo hagan, la mayoría de veces la cuna, es vital para que puedan dormir sin que haya ningún peligro.
Los bebés, cuanto menos tengan en la cuna, mejor. Y es que los objetos que tengan en ese espacio pueden ser las potenciales causas de la muerte súbita del lactante. Entre los objetos que debemos evitar que nuestros bebés tengan en su cuna se encuentran las chichoneras. A pesar de que estos protectores de cuna cumplen la función de amortiguar los impactos que puede llegar a tener nuestro hijo con los barrotes o las paredes de la cuna, pueden ser un motivo de la muerte súbita del lactante.
La Academia Americana de Pediatría desaconseja el uso de chichoneras. Los pediatras señalan que más que proteger de golpes, los bebés pueden llegar a tener más peligro por el riesgo que puede haber de asfixia y ahogamiento. Los bebés no controlan sus movimientos, y al moverse y posicionar su cara al lado de estos protectores de cuna, puede asfixiarse al quedar obstruidas sus vías respiratorias.
Nuestro bebé va a respirar mejor si no tiene chichoneras que recubren la cuna, así como prevenimos peligros innecesarios que pueden ocasionar estos protectores.
Otros elementos que no deben de estar en la cuna
Así como no recomiendan el uso de chichoneras, también aconsejan que nuestro bebé en la cuna no tenga sábanas, mantas u otros elementos que puedan asfixiar al bebé.
Para que no pase frío, es recomendable acostarle un poco abrigado o también subir la temperatura ambiente. Los peluches cuando son muy pequeños también debemos retirarlos de la cuna para prevenir que su cara quede pegada a ellos y les provoque la obstrucción de las vías respiratorias.
Los pediatras recomiendan que el bebé duerma de espaldas, en un colchón firme y sin objetos y elementos alrededor.