Frases que ilusionan: “Todos tenemos que hablar y compartir sobre educación”
La educación es un tema importantísimo, un reto que a veces nos desborda. Pero es también una tarea de toda la sociedad, así que ponerla en el centro, reivindicar la importancia de debatir y reflexionar juntos (ojo, que no hemos dicho juzgar) puede hacer que este reto sea más llevadero. Esta idea es central en nuestros encuentros y artículos y es también una idea del querido Carles Capdevila. Lo vemos con la historia de Paco y sus padres, que se apoyaban en su entorno para educar.
Los padres de Paco, de cinco años, tienen una excelente relación con la maestra, hasta el punto de que, cuando empezaron a ver comportamientos raros posiblemente debidos a los celos por la llegada de un nuevo hermanito, debatieron el tema con la maestra para tener ideas nuevas. Además, los padres, Raquel y Fernando, tienen una pandilla de amigos que conocieron en preparación al parto, estando embarazados de Paco. Y con ellos, comentan, debaten y reflexionan sobre temas de educación, aprenden los unos de los otros y crecen juntos. Ni que decir tiene que los abuelos y los tíos de Paco también son aliados de sus padres en esto de educar, porque aportan ideas positivas, debaten, sirven de apoyo y acompañan ante los retos constantes de criar y educar. Incluso han asistido a algún encuentro sobre educación, se han apuntado a algún curso en Internet… En definitiva, Raquel y Fernando piensan que, afortunadamente, no solo son ellos los que educa a Paco, y les parece genial. Reciben las ideas, sugerencias, debates y ayuda de muy buen grado, aunque es cierto que han tenido que poner límites a la gente que juzga o critica de manera destructiva e intentar aprender de todas las opiniones.
Un día, Raquel y Fernando están en la salida del cole con Paco y los padres de Lucía, una niña de la clase de Paco, salen escandalizados porque la maestra le ha comentado que su hija llevaba una temporada muy nerviosa y quería saber cómo se comportaba en casa.
-¡Habrase visto que profe más entrometida! ¡Como si tuviera que contarle yo mi vida, no te fastidia!- decía Marta, la madre de Lucía
-A nosotros nos dijo más o menos lo mismo cuando Paco empezó a comportarse de forma extraña al llegar el bebé. Nos pareció que así ayudaríamos entre todos a Paco a sentirse mejor. Yo creo que todas las opiniones ayudan y es bueno que la maestra y los padres compartamos información, ¿no? – dice Fernando.
-Hombre, Fernando, a mi hija la educo yo. Nadie tiene que venir a decirme cómo hacerlo ni preguntarme qué tal en casa. Que se ocupe de la clase y no se meta donde no le llamen – contesta Marta, cada vez más nerviosa.
-Pues la verdad es que en la reunión yo no me sentí juzgada, Marta. Y no estoy de acuerdo, no solo educas tú a Lucía, está tu marido, la maestra, la familia, los amigos… Vamos, a mí me encanta que tengamos una red de aliados para educar. Por eso es mejor compartir la información, que aprendamos, que podamos reflexionar juntos. Y la verdad que a nosotros la maestra nos ha ayudado mucho. Mejor que no desaproveches la oportunidad.
Si quieres debatir sobre este apasionante tema, para aprender de otros padres y madres y de grandes expertos, no te pierdas nuestro sexto encuentro el 10 de junio en Barcelona.