Queridos familiares de nuestros hijos:
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS. Por vuestro cariño y vuestras atenciones. Por vuestra generosidad, vuestra ayuda y vuestros consejos. Vuestro ejemplo de incalculable valor y vuestro apoyo constante. Agradecemos cada gesto y cada detalle, toda la atención y todo el amor que les dais a nuestros hijos. Estamos convencidos de que todo parte de la mejor de las intenciones y del cariño, pero hemos tomado una decisión que nos gustaría compartir con vosotros.
Les estamos educando todo lo bien que sabemos. Cometeremos errores y nos equivocaremos muchas veces, pero tenemos muy claro que no queremos que crezcan como personas materialistas o consumistas, que dependan de las cosas y que no sepan apreciar gestos de cariño o sacrificio de los demás, así que os pedimos que salvo en sus cumpleaños o Navidad, no les regaléis nada. Nada material. Ni de comer, ni juguetes, ni en concepto de “premio” ni de “mira lo que te traigo”.
Sabemos que un huevo Kinder amaina una tempestad mucho más rápido que nuestra paciencia, pero queremos que aprendan a gestionar sus emociones, no a bloquearlas a cambio de chocolate, queremos que aprendan a respetar a los demás y que aprendan a saber estar a la altura de las circunstancias, no que “se callen” si hay caramelos o que aprendan a jugar sin algo que acaban de “desenvolver”.
Queremos que aprendan a cuidar sus cosas para que les duren, valorar el esfuerzo que cuesta conseguirlas y que un “buen comportamiento” no tiene que ir seguido de un “premio”, sino que es algo bueno para ellos seguir intentando avanzar.
Sabemos que entenderéis perfectamente esta decisión y nos apoyaréis para poder seguir educando a nuestros hijos de una manera responsable, también sabemos lo genial que es ver sus caritas de ilusión ante una sorpresa y que a lo mejor a todos nos cuesta no hacerles detallitos, pero imaginaos que esas caritas de emoción se producen por el simple hecho de veros, y no por lo que les vais a regalar.
Y no os preocupéis porque puedan ser los raros o diferentes, para nosotros no es algo negativo, de vez en cuando, ir contracorriente; ya les contaremos cuando sean adultos que “todo fue culpa nuestra” 😉
Vamos a darles nuestro tiempo, nuestro cariño y nuestro ejemplo.
Esos serán sus mejores regalos.
GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.
