Hace unos días Ricky Martin contó cómo había explicado a sus dos hijos por qué tienen dos papás. La noticia apareció en todos los medios de comunicación. Hablamos con el psicólogo infantil Alberto Soler sobre los nuevos modelos de familia. ¿Son aceptadas por la sociedad? ¿Qué podemos decir a nuestros hijos si se extrañan de que algún amigo tiene dos padres o dos madres?
¿Crees que en nuestra sociedad se respetan los nuevos modelos de familia?
Tenemos la fortuna de vivir en un país que, según algunas encuestas, es el más tolerante con la diversidad sexual de todo el mundo. Gracias a los cambios legislativos de la pasada década los niños han crecido viendo como normal esa diversidad, aunque todavía queda mucho camino por recorrer. Hay prejuicios que todavía se mantienen en mayor o menor grado.
¿Cómo podemos contribuir desde casa y como sociedad al respeto a los nuevos modelos de familia?
No tenemos que hacer nada muy especial, simplemente respetando nosotros esos tipos de familias. Los niños viven con mucha naturalidad que su amigo o amiga tenga dos papás o dos mamás, ellos no se cuestionan tantas cosas como los adultos. Somos nosotros, quienes no crecimos en este contexto de diversidad y tolerancia, quienes tenemos que hacer a veces un esfuerzo más consciente, pero ellos ya llevan la tolerancia de serie. Si no escuchan mensajes intolerantes es extraño que ellos solos lleguen a pensar así.
Si nuestros hijos se extrañan porque un compañero tiene dos mamás o dos papás, ¿qué mensaje podríamos transmitir para fomentar el respeto a la pluralidad?
Como comentaba, muchas veces los que se extrañan son los padres, no los hijos. Pero en estos casos basta con un mensaje muy sencillo:“Hay muchas familias distintas, las hay con dos padres, con dos madres, con un padre y una madre, con sólo una madre o sólo un padre. Todas son igual de buenas y merecen el mismo respeto”. Y, por supuesto, actuar nosotros en consecuencia, claro.
Si nuestro hijo nos cuenta que ha recibido burlas o rechazo por tener dos papás o dos mamás, ¿cómo podemos abordarlo en casa para empoderarlo?
Actuaríamos del mismo modo que lo haríamos si se burlan de él por cualquier otro motivo: fortaleciendo su autoestima, ayudándolo a encontrar la respuesta a esos ataques con la que se sienta más cómodo. Si el problema se agrava, será necesario hablar con la dirección del centro para que tome cartas en el asunto y lo corte de raíz. Existen protocolos muy claros para evitar el acoso escolar por cualquier motivo, y este es uno más de los posibles motivos. Y si el malestar del menor se prolonga y tenemos dificultades en acceder a él o ella, podemos facilitar ayuda de profesionales que le echen un cable para construir los recursos necesarios. No obstante, aunque algunos niños pueden recibir ataques o burlas por este motivo, en varios trabajos con hijos adultos de madres lesbianas, estos no recuerdan haber sido más blanco de burlas o victimización que los hijos de madres heterosexuales.
Si te interesa educar en el respeto a la diversidad de género, puedes ver estos artículos:
- Entrevista a Mamá y Papá de Diario de una Familia Trans
- Ponencia de Alba Alonso: Eduquemos sin etiquetas
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