La Navidad es, por excelencia, el momento familiar idílico: toda la familia junta celebrando alrededor de una chimenea donde la felicidad es palpable. Mucho postureo y poca realidad. ¿Y qué pasa entonces cuando tu hijo tiene que pasar parte de esas fiestas con tu ex pareja porque os habéis separado? ¿Significa eso que tus navidades serán menos felices? No tiene por qué.
Como siempre, todo depende de cómo te lo tomes tú personalmente. Puedes aprovechar esos días sin tu hijo para hacer otros planes que no puedes hacer habitualmente, o celebrar nochebuena o nochevieja en un local donde hagan una fiesta.
Cuando formas partes de una familia enlazada, como es mi caso, has de aprender a sacar la parte buena de cada momento. Hay muchas situaciones en las que mi hijo está fuera porque le toca estar con su padre y me ayuda pensar en lo mucho que está disfrutando él para no echarlo de menos más de lo normal.
Puede ser que tu hijo lo pase mal por tener que irse a otra casa o que lo tenga asumido. En caso de que no sea un momento fácil, te animo a que trates de facilitárselo tú:
- Repasad los planes que tendrá cuando vaya a la otra casa, con qué familiares estará, seguro que recibirá regalos, esto le ayudará a recordar que allí también estará bien.
- Si tienes más hijos que se quedan en casa porque forman parte de tu nueva familia y eso le genera envidia, saca la parte positiva de que él o ella tengan más familia: más gente con la que compartir estos días y más planes que realizar.
- Haced un calendario para que tenga claro qué días estará en una casa y en otra, esto les da mucha seguridad. Mejor si participa en la elaboración de este calendario, que lo escriba si ya sabe o lo coloree, por ejemplo.
- Acordad los planes que realizaréis cuando vuelva si aún quedan días de fiesta o hablad de lo que haréis antes de que se vaya.
- Recuérdale que le llamarás, podéis establecer los días también, para que te vaya contando qué tal lo está pasando.
Si consideras estas fechas demasiado emotivas o difíciles para ti, te animo a que busques ayuda para poder disfrutar tú también.
Otro conflicto habitual pueden ser los regalos que se pedirán en cada casa. Si es posible, pregunta cuáles ha pedido allí para no repetir o tratar de que sean equitativos. Recuerda que si no hay colaboración por la otra parte tú no podrás hacer nada. Te invito a que decidas qué regalos tendrá en tu casa sin pensar que en la otra hay un exceso, si no teniendo claro el número de regalos o el tipo que crees mejor para tu hijo.
Cuando vuelva de estar en casa de tu ex, anímale a que cuente qué ha hecho, qué le han regalado y cómo se lo ha pasado. Cuéntale que tenías muchas ganas de verle, y de estar de nuevo en familia, eso le hará sentirse parte y conectado.
Es posible que venga con las emociones un tanto revueltas, es normal, viene de estar en otra casa, con otras normas, con muchas celebraciones y tiene que aterrizar y recolocarse. Dale su espacio, su tiempo y, sobre todo, mucho amor y comprensión.
Te deseo unas felices navidades.