¿Por qué en las escuelas pretendemos que nuestros hijos estén sentados seis horas seguidas? ¿O recibiendo órdenes durante seis horas? Son dos de las preguntas que se hizo el profesor y musicólogo Javier Romero durante nuestro evento de Las Palmas de Gran Canaria, el pasado 11 de marzo. Su lamento vino acompañado por una reflexión: si a los adultos nos cuestan ambas cosas ¿por qué nos empeñamos en hacerlo con los más pequeños?
Por eso se propuso estimular nuestro cerebro, nuestro nivel atencional y nuestras neuronas espejo a golpe de ritmo, baile, diversión e incluso a golpe de matemáticas. Y es que, tal y como nos dijo, en lugares como China están fomentando el movimiento mientras se estudia o se come.
“Ojalá en los sistemas educativos se hubiese implantado ya el pupitre con pedales, o el que nuestros hijos puedan tener mientras aprenden una pelota que puedan estrujar. O recursos motores, algo básico para la estimulación. O incluso oler a cítrico, que se ha demostrado que aumenta el proceso de atención y concentración”, reivindicó este musicólogo, que también trabaja los conflictos por medio de las actividades cooperativas.
Javier Romero activó con nosotros los tres ejes principales del aprendizaje:
- La memoria
- La atención
- La motivación
Y todo ello mientras trabajábamos todas y cada una de las partes de nuestro cerebro: desde el lóbulo frontal (encargado de las funciones cognitivas, conducta, memoria de trabajo…), hasta el parietal (el de la información sensorial), pasando por el occipital (parte visual y del movimiento), el temporal (centro de almacenamiento memorístico) y el cerebelo, relacionado con el sistema límbico y, por tanto, con la regulación emocional.
“Recordamos lo que nos emociona“, sentenció este profesor, justo antes de tocar el corazón de todos los asistentes incluyendo una canción típica canaria en su repertorio de ejercicios y bailes. Desde luego, que consiguió que su ponencia, como cada una de las que lleva a cabo, sea difícil de olvidar.
La ponencia, llena de risas y ritmo, formó parte del marco de un evento inspirado por la Fundación Disa y patrocinado por Totto, el Colegio Hispano Inglés, la Universidad Fernando Pessoa, Multiópticas, organizado por Canarias 7 y con la colaboración de la Fundación Nos movemos.
